miércoles, 19 de noviembre de 2014

Lubina con Doble Calabacín

Sé que estáis intrigados con qué es eso del doble calabacín. Para empezar es una forma de no ponerle un nombre tan largo al plato en el que haya que contar todos los ingredientes que lleva. Y para seguir, es doble calabacín porque lleva una salsa de calabacín y cilantro y el acompañamiento son unos espaguetis de calabacín con leche de coco. Calabacín + Calabacín = Doble Calabacín.

Y después de esta aclaración, os cuento que me encanta la lubina, si es salvaje mejor, aunque la mayoría de las veces las que encontramos en la pescadería son de las que comen lo que les dan, nadan por donde les mandan y son más o menos todas del mismo tamaño; es decir las de piscifactoría. La salvaje es de mayor tamaño, más sabrosa, más cara y más difícil de conseguir, pero merece la pena por lo menos para alguna ocasión especial.
Pero no hagamos ascos a las de piscifactoría, que nos permiten disfrutar de ellas todo el año a un precio asequible y su carne y su sabor no está nada mal. Y no sabéis como se las comen los niños, simplemente a la plancha.
Estas últimas son las que elegí, o no me quedó más remedio que elegir a mí, para la cena del viernes. Y os puedo asegurar que la cena no nos defraudó lo más mínimo.

Después de una tarde de amiguitos del pequeño en casa celebrando su cumpleaños feliz y a las 22.30 de la noche, hizo falta un poco de música para entrar en faena, pero enseguida estábamos inmersos en  nuestro Tasty Fridays. Que viernes que dejas escapar, viernes que no vuelve.

INGREDIENTES
(2pax)

3 Lomos de Lubina
1 Calabacín
25g de cebolla
1 diente de ajo
Cilantro fresco
Guindilla o chile picante
1 lata de leche de coco
Aceite de oliva
Sal y pimienta

Hacemos los espaguetis de calabacín, yo tengo un artilugio que me compré hace tiempo que es como un sacapuntas y que hace espaguetis de verduras. Si no lo tenéis, valdría un pelador de los que tienen una parte para cortar en juliana. Con este tendríais que hacer los espaguetis o las tiras a lo largo del calabacín. Entonces quizás necesitéis dos calabacines en vez de uno, por la forma de cortarlos y aprovecharlos. Aunque los restos se pueden aprovechar para la salsa. En vez de ir a lo largo, y si os atrevéis, podéis ir en espiral, que al final es lo que hace el aparato que tengo yo. Y como última opción podríais cortarlos en tira muy finas a cuchillo. Hice 150g de calabacín y si sois de buen comer será un poco escaso, es que en crudo abultan más pero luego al cocerlos menguan.


Ponemos un poco de aceite de oliva en una cacerola, damos una vuelta a los espaguetis y cubrimos con leche de coco; utilicé media lata. Salpimentamos y dejamos cocer 5 minutos a fuego medio. El tiempo depende un poco del grosor y de si os gustan más al dente o menos. Con este tiempo quedaron al dente. Además si los dejáis en la leche de coco mientras preparáis lo siguiente siguen cociéndose un poco. Probarlos también de sal por si os habéis quedado cortos. Para servirlos hay que escurrirlos, no tiréis la leche de coco, os puede servir para cocinar otra cosa.

Para la salsa de calabacín y cilantro. Pelamos el diente de ajo y lo ponemos entero en una cacerola pequeña a sofreír con un poco de aceite de oliva. Cuando empiece a tomar color, añadimos la cebolla picada. Dejamos que se sofría y añadimos el calabacín (110g) cortado en trozos no muy grandes ni muy gruesos. Damos una vuelta, cubrimos con agua y añadimos sal. En 7 minutos lo tenía listo. Escurrimos y pasamos todo al vaso de la batidora. Añadimos un poco de pimienta, el cilantro fresco picado, como una cucharada, y un poco de guindilla. Cuidado con la guindilla o el chile, vale más echar un poco y probar, y si queremos un poco más se lo añadimos. Para batirlo no me hizo falta añadir agua de cocción porque el calabacín ya chupa mucha agua y sino la salsa quedaría demasiado líquida.

Sólo queda salar las lubinas y hacerlas a la plancha, estas al no ser muy grandes se hacen enseguida, tened cuidado de no pasarlas, sería una pena. Respecto a la cantidad de lubina, yo puse tres lomos porque para los dos eran suficientes, tenéis que mirar el tamaño y lo que come cada uno.
También creo que la receta es perfectamente aplicable a otro tipo de pescado, así que no tengáis miedo a probar.

El resultado es un plato con un sabor muy especial, diferente, que nos encantó.